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Será la única Selección debutante en Brasil, y con su entrenador Sušić quiere ir por un logro grande. Tiene grandes jugadores, aunque todavía le falta para desarrollar un buen funcionamiento de equipo. Tiene tiempo, y piezas y calidad para armarlo.


Como hace rato no ocurría, para la próxima Copa del Mundo hay muchas selecciones candidatas a ser la revelación del certamen. Entre ellas, existen las que verdaderamente tienen chances, otras que buscan sumar experiencia para ir por todo a Rusia 2018, y las que apuntan a dar un golpe que sería de excesivo asombro para todo el mundo futbolístico. En esta última condición, se encuentra Bosnia Herzegovina, equipo emergente y con buenos jugadores.

La particularidad que tiene este seleccionado europeo es que continúa con la tendencia de que en todos los Mundiales hay al menos un debutante. Esta vez será Bosnia la cenicienta, siendo el único conjunto que disputará la Copa por primera vez en su historia. Después de hacer una gran Eliminatoria y clasificar por sobre Grecia, con misma cantidad de puntos (25) aunque con gran cantidad de goles convertidos (30 en diez partidos), su máxima ambición estará puesta en Brasil.

Esa capacidad goleadora destaca por sobre todas las cosas. Como se pudo observar fielmente ante la Argentina de Sabella, todavía no tiene las condiciones específicas para disputarle frente a frente un encuentro a una potencia. Sus deficiencias defensivas se mezclan con capacidad de juego y de ataque, con jugadores de renombre y categoría. Los mejores momentos de esta Selección responden a sus figuras, futbolistas que actúan en equipos de primera línea europea.

Dirigidos por Safet Sušić, la fase de clasificación fue de las mejores que ofreció su continente. Este entrenador adquirió experiencia en AS Cannes, Istanbulspor, Ankaragücü, Rizespor, y otros clubes, que le dieron la posibilidad de dirigir al elenco bosnio. Asumió en el cargo el 26 de diciembre de 2009, y el crecimiento del combinado que conduce está a la vista. Su periplo hasta aquí ya es histórico para toda la nación.

Volviendo a sus marcas en el grupo que tuvo que afrontar para sacar pasaje, Bosnia alcanzó muy buenas cifras. Además de la comentada gran cantidad de goles hechos, de los diez encuentros disputados sólo cayó en una oportunidad, empatando otro y ganando los ocho restantes. Números que en otras épocas hubiesen sido imposibles siquiera de imaginar en este equipo, que si es por puntos conseguidos en cada zona, acabó cuarta, ya que Holanda, Alemania y Bélgicafinalizaron primeros en sus respectivos sectores con más unidades conseguidas.

Dentro de esos números, hay implícita una realidad, que dice que más fundamentales son los jugadores que logran alcanzarlos. Son lo más importante, y Bosnia cuenta con varios jugadores de renombre. Cabe hacer una reseña particular por cada una de las estrellas con las que Sušić cuenta en su plantel.

Edin Dzeko: Es el goleador histórico de la Selección (debutó en 2007), ya que conquistó 29 goles con esa camiseta (51 partidos). Delantero del Manchester City, hoy ha perdido terreno con la llegada de Negredo, pero tiene condiciones de sobra. Sabe jugar con el cuerpo, es un gran cabeceador y muy buen definidor. No es ningún negado a la hora de retrasarse y generar juego y, a pesar de su altura y su porte físico, tiene técnica. Muchas veces se lo ha cuestionado por ser un atacante tosco y sin aptitudes, pero ha sabido demostrar lo contrario. Fue el segundo goleador de las Eliminatorias, con 10 tantos, en misma cantidad de cotejos jugados, alcanzando los 900 minutos en cancha (jugando absolutamente todo).

Vedad Ibišević: Compañero de ataque de Dzeko, es más referencia que el atacante citizen. Es un hombre de área, artillero, de esos futbolistas que siempre están en el momento y lugar indicado. Saca provecho de deficiencias defensivas con suma concentración, y tiene buen juego aéreo. Su equipo es el Stuttgart alemán, y es el quinto goleador histórico de la Selección (primera presencia, en 2004), con 15 tantos en 44 encuentros.

Miralem Pjanic: Jugador con una técnica y calidad exquisitas. Tiene un pie derecho muy fino, con precisión en los pases. Es el conductor de este equipo, que sufre bastante cuando él no está enchufado. Juega en BH como enlace en la mayoría de ocasiones, y en otras ha estado desde el inicio como volante por derecha, cerrándose y dejando el carril libre al lateral. En Roma desde 2011, actualmente que está lesionado Totti, es el líder en la generación de juego de los dirigidos por Rudi García.

Zvjezdan Misimović: Así como Dzeko es el máximo goleador histórico, este futbolista no quiere ser menos y le sigue los pasos. Tiene 23 tantos, aunque ha disputado más encuentros (72). Delantero con historia en el conjunto, hoy un tanto relegado por los dos puntas titulares, aunque es el primer recambio en ofensiva. Su club actual es el Dinamo de Moscú.

Ognjen Vranješ: Defensor central, es quizá la mayor promesa de estos días de la Selección. Tiene 24 años, juega en el Alania Vadikavkas de Rusia, y el entrenador lo subió a la Mayor después de adquirir experiencia en los seleccionados juveniles. Zaguero de control, marca, un tanto desorientado a la hora de salir a cubrir, pero con futuro.

Asmir Begovic: Arquero del Stoke City, es uno de los mejores de Europa. Puro reflejos, seguridad bajo los tres palos, descuelga muy bien los centros y es buen salidor con pelotazos precisos. Se hizo muy conocido en el último tiempo, gracias a su logro con la Selección, pero también por hacer el gol de arco a arco con su equipo en la Premier League inglesa cuando solo se jugaban 13 segundos del PT.

Un equipo que entra en el rubro de posibles revelaciones, pero que aún se encuentra en pleno proceso de armado, y espera llegar con las bases asentadas al Mundial. Las figuras descriptas anteriormente son la base del elenco bosnio, y su entrenador ya lleva casi cuatro años en el cargo. Llevó a su país al máximo logro futbolístico jamás alcanzado, y esperan poder hacer más historia.

Cuando alcanzaron la meta, el sufrido pueblo de Sarajevo y todo el país bosnio estuvo de fiesta. Por unas horas, para olvidar todo el sufrimiento. El fútbol mueve montañas, este fue un caso más, otro representativo entre tantos que ha dado históricamente. Bosnia Herzegovina irá a Brasil a dar la gran sorpresa. Tiene jugadores de sobra, lo que le espera es armar un buen funcionamiento colectivo que le permita ir con buenas aspiraciones al Mundial. 

Nicolás Galliari

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