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Por Luis Burgos




Si pensamos que a través de la noticia se comunica una información desconocida a los lectores, sobre un acontecimiento o suceso que sea actual, novedoso y desconocido. Estimado lector Usted pensará que lo que está leyendo ya lo conoce, por lo tanto tiene poco de noticia y bastante de relato. En cierto aspecto de esta nota tiene razón, porque no podemos eludir la realidad del “Rojo”, su mal debut en la B Nacional, que determinó la salida de Miguel Brindisi. En su reemplazo la Comisión Directiva del “Rey de Copas” pensó en Omar De Felippe, un técnico conocedor de la categoría y de éxito en la misma, por ejemplo con Olimpo de Bahía Blanca o con Quilmes, equipos con los que ascendió a primera.

Esa actualidad insoslayable, también dice que el plantel de Independiente ayer completó en Villa Domínico, su segundo entrenamiento con el nuevo cuerpo técnico, encabezado por De Felippe. Trabajaron por espacio de dos horas, hicieron movimientos con pelota, trabajos tácticos y de precisión en los pases. Tanto de Felippe como sus colaboradores pidieron orden y la coordinación y mecanización de los movimientos. Hubo buen ambiente y mucho dialogo, procurando el cuerpo técnico conocer a fondo con el material que cuenta y que el equipo vaya descubriendo que es lo que estos quieren, cual es la idea de juego. Fue un entrenamiento intenso en la búsqueda de ir ganando tiempo. Con vistas al próximo encuentro frente a Independiente Rivadavia de Mendoza, Independiente trabajará en el Estadio Libertadores de América este viernes, efectuando la primera práctica de fútbol y allí comenzar a delinear la formación. La práctica será a puertas cerradas a partir de las 10, y una vez finalizada, el entrenador dará la habitual conferencia de prensa previa a cada partido.
En su época de ayudante técnico de Falcioni

Hasta aquí la información conocida por muchos. Pero como decía al comienzo de la nota, la verdadera noticia empieza aquí, porque De Felippe no es un técnico o un ciudadano común, es un veterano de guerra. Estuvo combatiendo en la guerra de las Islas Malvinas. Y si bien la nota es de un portal de fútbol, no podemos dejar de lado “La Historia” detrás del hombre, que hoy tiene sobre sus espaldas las ilusiones de los hinchas de Independiente. Durante muchos años Omar mantuvo silencio sobre sus experiencias en la guerra y su posterior reinserción en la sociedad. No hace demasiado tiempo que decidió romper el silencio, y así pudimos conocer parte de la vida de él.


"El fútbol me ayudó a olvidar las Malvinas"

Omar De Felippe, con 19 años, jugaba en las inferiores de Huracán cuando fue convocado para ir a la guerra de Malvinas. Dice que desde que llegaron a las islas, hablaban de fútbol, pero "cuando cayó la primera bomba, el fútbol dejó de existir". Corría el año 1982 y paralelamente a la situación que vivía nuestro país, en España se jugaba el Campeonato Mundial de Fútbol, del que participó Argentina. Comentaba De Felippe al respecto: "No supe de fútbol, ni de nada. Sólo supe de miedo, de ayudar a los heridos, de matar o que te maten, de la impotencia al entregar las armas", contó un emocionado De Felippe.

Omar De Felippe, el primero de la izquierda
También en su relato narró cómo se reinsertó en el mundo del fútbol. "Cuando al acabar la guerra, nos encontrábamos presos en el Buque Inglés Camberra, al recoger la bandeja del almuerzo, vi que los ingleses habían colgado un cartel con los resultados del Mundial. Argentina le había ganado a Hungría por 4 a 1. Fue entonces cuando recordé que se estaba jugando un Mundial". Al regreso a su hogar, tomó inmediatamente la decisión de seguir su carrera como futbolista, contrariamente a otros compañeros de guerra, que sufrieron y mucho su reinserción en la sociedad. "Descansé una semana y viajé con el equipo a La Plata, donde jugábamos con Estudiantes. En aquellos momentos, iban 16 jugadores: los once que jugaban, y cinco al banco. Pero ese día fuimos 17, porque a mí me daban una placa por haber combatido”.

Omar es optimista con respecto a Independiente y su futuro próximo, y como no serlo, él que fue a una guerra, y regresó sano y salvo.


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