Por Luis Burgos; @chichongo
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| Amadeo Salvo, Presidente del Valencia |
La vorágine del fútbol actual se devora todo, esto es lo que piensan los socios del Valencia. Los socios de uno de los grandes clubes de España y Europa, han pasado de celebrar el título liguero en 2003, dejando atrás al Barcelona y al Real Madrid; de clasificar en seis ocasiones a la Champions League; cómodamente instalados en el Mestalla, a ver como hoy su equipo navega en mitad de tabla y sumido en deudas. Su principal acreedor, Bankia al que la entidad “Che” le adeuda más de 300 millones de euros le niega la refinanciación y ha decidido ponerlo en venta.
El banco quiere recuperar su dinero, y la junta de accionistas del club que éste no caiga en manos de cualquiera. En definitiva, la venta (traspaso de la deuda) estudiada al detalle es imprescindible para la satisfacción de ambas partes; de la solvencia del inversor que se interese en la operación dependerá tanto que la transacción no quede en riesgo como que la institución pueda gozar de un proyecto viable en lo deportivo, en lo social y en lo económico. En juego no sólo hay billetes, sino también sentimientos.
La deuda reclamada se divide entre la Fundación Valencia CF que debe casi 90 millones de euros y la sociedad anónima deportiva, que agrega 220 millones al total reclamado por Bankia. Esta sería la cantidad que, en un principio, debería asumir el comprador para tomar el control del club. El total adeudado está vencido desde hace más de un año y el banco no ha ejecutado las garantías (el estadio de Mestalla) porque ha ido prorrogando el pago de la deuda de seis meses en seis meses. Esta situación, sin embargo, no se volverá a producir. El banco quiere que el comprador asuma también la responsabilidad de una refinanciación.
Ni siquiera la venta de sus activos más importantes sobre el césped ha paliado una situación que ha terminado estallando definitivamente para desesperación de los hinchas ches, receptores de este cúmulo de despropósitos. Ellos son los que, impotentes, han sufrido ante la salida de sus mejores jugadores. Entre 2009 y 2013, Raúl Albiol, David Villa, David Silva, Juan Mata, Jordi Alba y Roberto Soldado abandonaron la entidad.
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| Estadio Mestalla, la casa del Valencia |
El proceso de venta del Valencia CF está en un momento decisivo. La aparición de un fondo de inversión, interesado en la compra, operación que está siendo analizada en estos días por Bankia, la Generalitat Valenciana y la Fundación Valencia CF, propietaria formal esta última del 70% del capital del club, le ha puesto vértigo a la situación. Según todas las partes implicadas, la operación podría cerrarse en cuestión de días. Sin embargo, los detalles de la operación se prolongarán durante meses.
Esta es una situación límite a la que se llega por la necesidad de resultados, de una mala política financiera, dirigentes incapaces y a un sistema de fichajes que empieza a estar en el ojo de la tormenta ya que solo genera enormes ganancias a los intermediarios, representantes y no a los clubes, que son el alma del fútbol que tanto nos gusta.
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